EVOCANDO LA FIESTA PATRONAL EN HONOR A SANTIAGO Y CARMEN Con entusiasmo y mucha alegría se conmemoró la fiesta patronal dedicada a Santiago el Apóstol y a la virgen del Carmen organizado por la Asociación Unión Regional Chilcas (AURCH) en su local de San Juan de Lurigancho. La fiesta estuvo programado este año, para los días sábado 11 y domingo 12 de julio, con un amplio programa, difundido con antelación por la Asociación y por el funcionario principal: el Capitán, don Rudesindo Lorenzo Cerrate y su esposa doña Teresa Chávez de Lorenzo. Como en años anteriores, la tradicional festividad patronal de los migrantes chilcasinos en la capital de la República, congregó a gran cantidad de público que colmó, especialmente el domingo por la tarde, el amplio local de la AURCH, muy bien remozado con el pintado de sus paredes laterales. Los espectáculos de fondo que concitaron la mayor atención del público asistente fueron: la presentación de los caballos de paso y de las capitanas de Raquia. Victorio Sotelo Robles y sus dos acompañantes, actuaron de chalanes en el baile de los caballos de paso, con la demostración de marchas, huaynos y marineras, muy bien conducidos por los chalanes, que arrancó el aplauso de los asistentes. Este espectáculo artístico con los equinos de pura sangre, es ya un número tradicional en la fiesta de los chilcasinos desde hace una década, donde se lucen adiestrados chalanes como Victorio Sotelo y sus acompañantes, entre los que hay niños con un futuro promisor en el manejo de los caballos de paso. Por otro lado, las Capitanas de Raquia, se presentaron este año como espectáculo especial para acompañar al Capitán Rudesindo Lorenzo. El conjunto de las capitanas está conformado por las señoritas Maryté Minaya, Diana Bernardo y Keterine León, debidamente asesoradas por el señor Oscar Bernardo Chirinos. Este trío de hermosas damas hicieron su presentación danzando varios números especiales, con coreografías propias y con el acompañamiento de la banda de músicos, que para este caso toca melodías igualmente especiales. Las Capitanas de Raquia son artistas ampliamente conocidas en Lima y en norte chico; esta vez han estado en el local de la AURCH deleitando al público con sus prosaicas coreografías y recibiendo el cariñoso aplauso de la masa asistente. Con el entusiasmo que les caracteriza, las capitanas se quedaron en la fiesta y acompañaron al Capitán en la famosa escenificación de “La Entrada a Cajamarca”, portando estandartes y cintas de colores de estilo chilcasino. Tanto el sábado como el domingo, el programa de la fiesta se cumplió al pie de la letra. Los séquitos de bailantes, el capitán y sus ocho vasallos; el Inca, custodiado por el Rumiñahui y rodeado por sus cuatro pallas, cumplieron con todos los rituales de costumbre: pedido de la licencia, cera Apia, huayi qaqay, misa y procesión, quema de fuegos artificiales y retreta de bandas y orquesta, el sábado por la noche. Salva, misa y procesión, pinkida, presentación de números especiales, entrada del capitán, elección de nuevo capitán y despacho, el domingo todo el día. Hubo buen servicio de caldo madrugador, merienda del sábado a cargo de los mayordomos y gran almuerzo del domingo ofrecido por el Capitán y su esposa. No faltó el clásico “chinguirito”, la bien fermentada chicha de jora y las infaltables “chelitas”. Las bandas de músicos especialmente contratadas: Centro Musical Roca (Bolognesi) y Armonía Musical Huanri (Ocros) cumplieron bien en sus papeles de alegrar al público; la orquesta Santo Toribio de Huanri hizo lo mismo acompañando al Inca y alternando con las dos bandas. Concluida esta fiesta en Lima, varias familias han viajado a Chilcas, a disfrutar de la fiesta original en la misma tierra. (Las imágenes no mienten: disfrútenlos) LAS CAPITANAS DE RAQUIA Qué de especial tienen las Capitanas de Raquia? Es la pregunta que se hacen muchos lectores. Aquí les damos un breve resumen. Se les conoce con este nombre a un grupo de artistas: tres mujeres y tres niños varones, quienes llevan el nombre completo de “Las Capitanas y Capitancitos de Raquia”, especializado casi profesionalmente en una danza que se practica en los pueblos andinos del valle del Fortaleza. Raquia es uno de estos pueblos, capital del distrito Antonio Raimondi en la provincia de Bolognesi. El trío que acompañó al capitán Rudecindo Lorenzo es precisamente de Raquia, donde esta danza es popular durante las fiestas patronales. Otros pueblos que comparten esta variedad de danza son: Cajacay (Bolognesi), Ichoca, Marca, Huambo, Pampas Chico, Mayorarca, Santa Rosa (Recuay). En cada una de estas localidades existen también danzantes especializados, los más famosos proceden de Ichoca y de Cajacay, en varones como en mujeres. En todos estos pueblos es común presenciar esta danza, que difiere de lo que tradicionalmente se baila en toda la región de Bolognesi, Recuay y Ocros. En qué se diferencia el baile de la danza de los capitanes? En toda la región sur de Ancash, los bailes tradicionales son de capitanes e Incas. Capitán e Inca, son funciones de las fiestas patronales, que los comuneros y familias no comuneras deben cumplir por obligación o por propia voluntad devocionaria. En algunas poblaciones de la misma región, estas dos funciones principales se complementan con la función de Estandarte y con la de Mayordomos. La vestimenta, los movimientos coreográficos, los ritos, las representaciones teatralizadas, etc., difieren de un pueblo a otro. Una de esas diferencias es precisamente el de las coreografías. En la amplia mayoría de poblaciones se practica el baile de los capitanes. Con sus indumentarias, sus símbolos representativos y con el acompañamiento de una banda de músicos, el baile consiste en ejecutar las marchas a pasos marciales, bailar el huayco y otras piezas musicales, apelando a la libertad de movimiento, siguiendo un orden normativo impuesto por la costumbre. Durante las paradas, la “obligación” del capitán y de sus vasallos es hacer bailar al público, integrarlo a la fiesta. La danza de los capitanes en cambio, no ejecuta bailes al libre albedrío, danzan bajo las pautas de una coreografía muy bien organizada. Cualquiera sea el número de sus integrantes, todos (as) ejecutan los mismos movimientos al unísono, al ritmo de la música que corresponde a cada momento dansístico: danza de recorrido, danza de llegada y danzas de presentación en la plaza o en las casas de autoridades y funcionarios. Los danzantes de capitanes como los de Raquia, Ichoca o Cajacay, ejecutan sus movimientos rítmicos haciendo sonar los tacos de los zapatos, que llevan espuelas, y cuando tienen que cumplir con movimientos especiales, el capitán mayor dirige para que los demás danzantes hagan lo mismo. Por la presentación de sus distintas coreografías en los patios de las casas o en las plazas, la danza de los capitanes del alto Fortaleza se ha convertido en un espectáculo para mirar y apreciar las virtudes artísticas de sus integrantes, aunque al final tengan que hacer bailar al público. Ante todo es espectáculo. En las fiestas patronales, la danza de los capitanes se complementa con la escenificación de la coreografía conocida como la “cuadrilla”, una representación artística cortesana de la Francia de los Luises, que llegó al Perú en el siglo XVIII y se quedó en esta parte del país convertida en una danza popular que los campesinos aún lo mantienen como parte de su cultura. Los capitanes de Raquia ni otros grupos que actúan en Lima no lo incluyen por obvias razones, pero en las fiestas patronales de lo migrantes de esa mini región se puede apreciar esta complicada y bella danza de la “cuadrilla” del alto Fortaleza. ( R. R.)